Los perros al igual que nosotros los humanos, tienen desgastes de salud naturales que son propios del avance de la edad, por ejemplo, la pérdida paulatina de la vista. Aunque los caninos son animales mamíferos muy inteligentes y pueden usar al máximo sus otros maravillosos sentidos como el olfato y el oído para apoyarse perfectamente pese a la falta de visión, esta patología puede conllevar situaciones sumamente difíciles tanto para la mascota como para su dueño. Si te preguntas por qué mi perro no puede ver sigue leyendo.
Motivos de la ceguera en perros
Son muchas las razas que padecerán de esta condición casi de manera segura al pasar a la edad adulta y son varias las posibles causas que pueden provocar dificultades en la vista, pero el tipo de raza influye mucho en este análisis.
En primer lugar podemos nombrar la patología que surge en los párpados, razas como cocker, terrier, bichon maltes, schnauzer, pekinés, bulldog francés, entre otros, son más propensos a desarrollar esta condición y a mediano o largo plazo comenzar una falta de visión progresiva.
También en la córnea, en el cristalino, en la retina y hasta en el cerebro se puede desarrollar una ceguera progresiva o total en todas las razas.
Por otro lado, también existen enfermedades que pueden despertar afecciones graves en los ojos como: la diabetes, las enfermedades renales, problemas graves en el corazón y algunas enfermedades infecciosas como la leishmaniosis.
Por esto, es de suma importancia que aprendamos a identificar las señales en nuestros perros que nos pueden estar avisando que está perdiendo la visión, muchas personas indican que «sospecho, que mi perro no ve bien»
Si tienes las sospechas de que tu mascota está perdiendo la visión, en principio fijate de la manera como se desplaza por la casa, aun cuando ya la conoce a la perfección puede chocar frecuentemente con las cosas, como sillas o muebles. Una prueba que puedes hacer es, mover temporalmente los muebles y las mesas de su sitio habitual y observar si el perro los ve en su nueva posición.
Otra infalible prueba es cuando lo llamas, si ves que no es capaz de reconocer o detectar a la persona que le llama por su nombre y para encontrarlo usa el olfato. Considera hacer una evaluación médica de manera urgente.
Continua con los exámenes caseros, ahora espera la noche y trata de jugar con el, llamalo a corta distancia y observa sus actitudes. La ceguera suele empeorar por la noche o en lugares con poca iluminación.
Dentro de casa también puedes probar mover su comida, su agua y sus juguetes de lugar, debes estar pendiente al final del día si los toca o en definitiva no logro encontrarlos.
Ahora, fuera de casa intenta llamarlo y observa con atención hacia donde gira la cabeza y cuanto tarda en correr hacia ti.
Otro detalle es que cuando lo paseas, el perro huele el suelo de la calle y corre con más precaución de lo habitual. Al momento de lanzarle su pelota o juguete, se detiene a pensar y a seguir el rastro mediante el olfato.
Si has notamos uno o varios de estos síntomas en tu mascota y crees que van en aumento, el mejor plan es que visites a tu médico veterinario de confianza para identifica el problema a tiempo.
Aprende a leer el color de los ojos de tu perro
Todos los días observa los ojos de tu canino, si los llegas a ver de color rojo o con exceso de lagañas es posible que el problema sea una conjuntivitis o queratoconjuntivitis. Esta es una condición que solo afecta las estructuras externas del ojo. El perro sentirá dolor y será molesto para él, intentara arreglar el problema frotando sus ojos y manteniéndolos semicerrados para recibir la menor luz posible. En este caso es importante que conozcas cómo curar la conjuntivitis en perros
Si ya tienes la leve sospecha de la ceguera de tu perro y observas sus ojos y se encuentran en un tono blanco o nublado, lo más certero es que sea un incremento de la presión intraocular o un glaucoma. Otro motivo que puede causar que el cristalino pierda su tono natural es que se trate de una úlcera. Cualquiera de estos procesos representar dolor para el perro, los verás con los ojos cerrados la mayor parte del tiempo.
Si un día observas a tu amigo peludo con la pupila dilatada y no logras detectar el color de su iris, es probable que el problema sea solo de la retina, detalla muy bien el estado del ojo porque lo mas seguro es que lo notes en buen estado, es cristalino pero la retina no le funciona. En este caso el perro no siente molestias.
Ahora, si tu mascota ya es de edad avanzada y sus ojos han dejado de ser de su color natural para ser de tono gris o blanco estarás frente a una catarata. Estas son más frecuentes y son parte del envejecimiento.